Aún tenemos que esperar casi seis años, allá por diciembre del 2017, cuando disfrutaremos muchos donostiarras de viajar en un tren de altas prestaciones con destino a otras capitales españolas.
En concreto, Madrid estará a tan sólo 3 horas de viaje. Está claro que ganará la batalla a los desplazamientos por carretera - autobús o vehículo particular - pero no así con el avión. Ahora bien, si las cabezas pensantes de Renfe Operadora lanzasen un producto, como diría yo, de "low cost" podría captar a muchos clientes del avión.
Expongo un breve resumen de las diferencias de tiempos de viaje si empleamos los dos medios de transportes más rápidos. En el caso del avión con dos opciones, dependiendo si realizamos un viaje de negocios o bien un viaje de placer, viaje éste que conllevaría la facturación de maletas.
En los supuestos, planteo una especie de trayecto de puerta a puerta, desde que salimos de nuestra vivienda hasta llegar al centro de Madrid (pongamos la estación de Atocha).
Veamos:
1/ Uso del avión sin maleta facturada: 25 minutos de casa al aeropuerto de Hondarribia, otros 25 de espera y subida al avión, 50 minutos de vuelo, 10 minutos hasta dar con el apeadero ferroviario de la T-4 y finalmente 30 minutos que me llevaría entre que me subo al tren de cercanías y afloro a la superficie de la estación de Atotxa. Tiempo total invertido: 140 minutos (2h.20)
2/ Avión pero con facturación de maletas: 25 minutos desde casa, 50 minutos dedicados a la facturación, espera y embarque, 50 de vuelo, 30 minutos para recoger las maletas, 10 minutos hasta dar con el apeadero ferroviario de la T-4 y finalmente 30 minutos que me llevaría entre que me subo al tren de cercanías y afloro a la superficie de la estación de Atotxa. Tiempo total invertido: 195 minutos (3h.15)
Con el tren de alta velocidad el tiempo de recorrido entre Donostia y Madrid sería de 180 minutos. A ello habría que añadirle 25 minutos para llegar desde casa hasta la estación de Atotxa y 15 más para pasar al andén de embarque. Así que el tiempo total invertido sería de 220 minutos (3h.40).
Conclusión avión / tren puerta a puerta:
Está claro que si viajamos en avión con regreso en el mismo día, la ventaja del medio aéreo es considerable: 80 minutos menos ... pero ocasionalmente con una tarifa más cara que el tren.
En cambio, si facturamos equipaje la ventaja del avión se reduce a tan sólo 25 minutos en cuanto a tiempo invertido. Es aquí donde el tren le puede ganar la batalla ... ya que puede que no nos importe ese tiempo de más si nos compensa económicamente gracias a las tarifas de "low cost"
Con el avión además tenemos que emplear uno o dos medios de transporte extras (metro o cercanías) para dirigirnos al lugar de residencia escogido en Madrid. ¡Demasiados transbordos y paseos por los pasillos de la T-4!.
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